TIMIDEZ: CUANDO CALLAR SE SIENTE MÁS SEGURO QUE INTENTAR HABLAR
Aprendí que callarme era más seguro. Que hablar podía doler. Pero con el tiempo, el silencio también empezó a doler. Esta no es una historia sobre etiquetas, es una historia sobre lo que aprendemos a hacer para sobrevivir… y cómo podemos aprender otra cosa.