Por qué las cebras no tienen úlcera?
A medida que voy entrando en contacto con más gente que me cuenta cómo son sus vidas, sus retos, las cosas que han ido experimentado a lo largo de su trayectoria vital, más segura estoy de que el origen de muchos de nuestros desequilibrios tienen que ver con el apego, con cómo lo aprendemos desde niños y con los apegos que somos capaces de establecer y mantener ya como adultos.